Hay un sólo trino entre tu amor y mi alma.
Mis ojos navegan
En el mismo azul sin fin donde tú danzas.
Tu arco-iris de sueños en mí tiene
siempre pradera abierta entre montañas.
Una vez se perdieron mis sollozos,
y los hallé, abrigados, en tus manos.
¡No me recuerdes! ¡Siénteme!
Un ruiseñor nos tiene en su garganta.
Los ríos que me traje de mis riscos,
desembocan tan sólo por tu playa.
Hay confusión de vuelos en el aire…
¡El viento que nos lleva en sus sandalias !
¡No me recuerdes! ¡Siénteme!
Mientras menos me pienses, más me amas.
"Julia de Burgos"